ARROYO TURQUESA

ARROYO TURQUESA

LO CONOCÍAS?

La belleza natural de Argentina no tiene límites. Desde los mares de piedra que susurran historias ancestrales hasta los saltos de agua que desafían la gravedad, nuestro país es un tesoro inagotable de maravillas ocultas. Aunque muchos creen conocer cada rincón de Argentina, aún hay un vasto territorio por explorar, un territorio que alberga secretos naturales guardados. Como por ejemplo el Arroyo Turquesa, en la Provincia de San Juan.

Un color intenso que regala tonalidades celestes. Una provincia que infla el pecho con imperdibles y joyas secretas. Un paisaje circundante repleto de montañas que contrastan con el matiz turquesa. Así es este tesoro escondido en la provincia de San Juan: único, imponente y -muy- codiciado. El arroyo está emplazado a casi 4000 metros sobre el nivel del mar, en plena Cordillera de La Ramada y abrazado por una de las cinco cumbres más altas de todo el continente: el Cerro Mercedario. Ahora, ¿por qué el fluir del agua adquiere esa colorimetría? Principalmente debido a los minerales a los que está expuesta en su recorrido, donde predomina el cobre. La particularidad es que no solo tiñe el agua, sino también las rocas que descansan en el fondo del arroyo. El resultado es una postal digna de cualquier red social donde la estética es condición.

Para poder conocer el Arroyo Turquesa el acceso es únicamente a pie, a través de un trekking de cuatro horas de ida y dos de vuelta. La dificultad es normal, pero requiere de una buena preparación física para poder vivirlo sin muchas complicaciones. La buena noticia es que la retina de los ojos capta la escenografía y todo valdrá la pena.